lunes, 16 de marzo de 2015

Contacto piel a piel entre mamá y bebé

El contacto piel a piel entre la madre y el recién nacido (sanos) enseguida del nacimiento, ha sido cuidadosamente estudiado por especialistas alrededor del mundo  y se han encontrado diferentes resultados benéficos de dicha acción, lo cual hace ampliamente  recomendable esta práctica. Se ha concluido que al colocar al bebé sobre el torso desnudo de su madre segundos después de haber nacido, reduce los llantos, lo mantiene calientito, mejora su desarrollo intelectual y motriz, lo ayuda a adaptarse a su nueva vida fuera del útero y a dormir más tranquilo, beneficia la interacción del bebé con la madre, facilita el comienzo  de la lactancia y ayuda a continuarla de manera satisfactoria.

Durante las dos primeras horas de vida el recién nacido está más alerta, por lo tanto es el momento propicio para el contacto piel con piel con la madre, pues debe llevarse a cabo inmediatamente después del nacimiento para lograr de manera satisfactoria los anteriores beneficios, incluso se recomienda prolongar este contacto si es posible una vez estando en casa.
Para los hospitales es también una práctica recomendable, pues reduce costos al ser una alternativa del cuidado rutinario en incubadora, tanto para prematuros como para nacidos a término, sobre todo en países que están en vías de desarrollo o lugares donde es escasa el agua potable, ya que al iniciar pronto una lactancia materna exitosa se reduce el riesgo de contraer enfermedades y la mortalidad en recién nacidos. 


La redacción anterior es una tarea realizada como parte de un curso impartido por CIELET.

Bibliografía: http://apps.who.int/rhl/newborn/gpcom/es/

No hay comentarios.:

Publicar un comentario